Escritorxs del Conurbano: Hoy, Catalina Camaño

Escritorxs del Conurbano: Hoy, Catalina Camaño
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“Estoy bastante desencontrada con algunas formas que va tomando el feminismo, siento que todo está muy pinkwashing últimamente”, reflexiona Catalina Camaño, escritora del oeste que, desde muy joven, supo mezclar la filosofía, la política, la revolución, el erotismo y la poesía en su vida y sus escritos.


La Ciudad charló con la poeta acerca de los mercados editoriales, lxs escritorxs conurbanxs, la importancia del trabajo autogestivo y sus futuros proyectos poéticos.


¿Cuándo empezaste a escribir? ¿Cómo fue ese inicio de relación con el mundo de la escritura?


Me parece que no hay un momento exacto, porque fue cambiando mucho mi relación con la escritura.
En un primer momento, a eso de los 10 años escribía como una forma de catarsis, me acuerdo estaba bastante compungida con terminar la primaria –siempre me perturbó mucho el paso del tiempo, el cierre de etapas– y escribía sobre eso o sobre mis miedos nocturnos, porque sufría mucho el insomnio.
Después a los 11, 12, no sé cómo ni porqué pero leía Benedetti, lo que me hizo pensar que yo también podía escribir poemas. Si mal no recuerdo el primer poema que escribí fue una oda a la profesora de matemática para reírme con mis amigas, y después vinieron todos los poemas de amor de mi adolescencia, que son realmente malos y súper autoreferenciales.
Hoy los leo y me dan mucho cringe, pero también ternura porque entiendo que fue parte del proceso. En el medio traté de escribir varias novelas y las abandoné todas pero descubrí que no me llevaba tan mal con los cuentos.
Recién a eso de los 18, 19 me tomé la escritura como algo más serio y entendí lo aburrido que es que los poemas sean una descarga de mis emociones, para eso están los diarios íntimos, los poemas no sé qué son, pero son otra cosa, más delicada y profunda.
En definitiva, comprendí el laburo y tiempo que implica escribir algo que me guste y me propuse encararlo así, con paciencia y prolijidad, porque me cuesta mucho estar conforme con mis escritos.


¿A quiénes consideras tus “referentes” en lo literario? ¿Cuáles son tus influencias?


En primer lugar, tengo que aclarar que yo estudio Filosofía, lo cual también tiene que ver con buscar inspiración en otro ámbito que no es necesariamente el literario, y siento que me nutre muchísimo y me da un montón de ideas.
Pero en lo literario, el primero e inigualable: Juarroz. Clarice Lispector también, adoro su prosa poética. O, por ejemplo, una autora conurbanense que leí de muy chica y la re-descubrí hace poco –me encanta lo que hace– es Dafne Mociulsky. Creo que podría hacer una lista enorme de autores que amo, pero básicamente suelo ir influenciándome de cada autorx que estoy leyendo en el momento.
Últimamente, por ejemplo, leí mucho a Juana Bignozzi y me parece, se va a notar en mis próximos poemas. También me obsesioné bastante con Martín Felipe Castagnet que me llama a romper un poco con lo que vengo haciendo y me invita a meterme en el mundo de la ciencia ficción, el cual miro con ganas hace tiempo.


¿Qué pensás del ambiente literario del conurbano? ¿Crees que, en el mercado editorial, lxs escritorxs del conurbano están ganando terreno?


Hay muchos mercados editoriales, y me parece que en el conurbano tenemos el nuestro propio y creo que eso está muy bueno. Dentro de un mercado más grande, me parece que no siempre la tiene tan fácil el conurbano pero, por ejemplo, todavía no leí Cometierra de Dolores Reyes y muchxs me lo recomendaron. O sea, hay ruido de autores conurbanenses.
El tema a veces es preguntarnos si queremos o no sonar en la radio, si hay otro camino, aunque entiendo que también si querés vivir de esto es probable que debas sumergirte en ese mundo.

“No me interesa que mis escritos triunfen en el mundo del feminismo cheto, ni siquiera triunfar. Sólo quiero escribir y que alguien me lea.”

Catalina Camaño acerca de la relación entre el feminismo y la poesía.


¿Cómo ves la literatura de las mujeres? ¿Crees que el pinkwashing influye en el mercado a la hora de vender literatura de mujeres?


En lo personal, estoy bastante desencontrada con algunas formas que va tomando el feminismo, siento que todo está muy pinkwashing últimamente. Las empresas y los Estados no dejan de intentar cooptar lo que en algún momento supo ser un movimiento marginal y potente.
Creo que hay ciertos derechos que pueden hacerle la vida más fácil a muchas en lo cotidiano, pero me parece que queda muy corto como lucha reclamarle derechos al Estado, con todo lo que implica la noción de sujeto de derecho, individuo, Estado. Es decir, a mí no me interesa ser parte de este sistema y no lucho por insertarme en él.
Hay muchos conceptos por repensar y últimamente estoy más apocalíptica que otra cosa. Sinceramente, no me interesa que mis escritos triunfen en el mundo del feminismo cheto, ni siquiera triunfar. Sólo quiero escribir y que alguien me lea.


De tu propio material, ¿Cuáles son tus escritos favoritos y por qué? ¿Dónde se pueden encontrar tus textos?


¡Qué difícil! Podría decir que me venían gustando mucho los poemas que parecen un poco cuentos. Hay algo de contar historias que podrían ser cuentos en formato poema que me llama mucho.
Suelen ser mis poemas más largos como Serpiente plateada, El día, Secreto de ciudad y Mi primer poema argentino. Sin embargo, últimamente le encontré el gusto a los poemas cortos porque estuve trabajando su potencia, me gusta que son más abstractos.
Tenía un blog, pero ahora está en pausa y prefiero no compartirlo, porque muchos de esos poemas están siendo retocados últimamente y pronto, o eso espero, saldrán a la luz en un poemario.
También publiqué un pequeño poemario erótico digital que lo vendo a distintos precios –para que elija lx lectorx- en mi linktree. Y algunos poemas los pueden encontrar en Calíope, que es un libro hecho por la Editorial Lítica, el cual recolecta poemas de todas mujeres conurbanenses.
Pueden seguirnos también en @cuarentenapoetica, que, si bien ahora estamos tomándonos un tiempo para repensarnos, pronto el proyecto va a traer muchas novedades y ahí pueden encontrar algunas cosas mías.


¿Qué consejo le darías a unx escritorx del conurbano que quiere comenzar a publicar sus escritos?


Que se dé todo el tiempo que necesite. Nada nos apura. No sé si es posible vivir de la escritura, ¡ojalá sí! Pero, como sea, es un proyecto a largo plazo que puede llevar mucho tiempo.
No creo que esté bueno publicar textos inmaduros, pero por unx mismx, no por lxs lectores. A veces hay que dejarlos reposar, darles un tiempo y después volver a ellos.
Por otro lado, aconsejaría que no se obsesione con buscar editoriales que le convenzan. Yo soy full partidaria de la autopublicación y del trabajo autogestivo propio, especialmente con algo tan personal como lo es la escritura: si lo que estás buscando no existe, inventalo.

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