“No hay arte sin una postura social”: Una charla con El Bhadra, un artista chileno en el conurbano bonaerense

“No hay arte sin una postura social”: Una charla con El Bhadra, un artista chileno en el conurbano bonaerense
facebook icon twitter icon telegram icon whatsapp icon

Me siento muy feliz de estar en el oeste porque es como estar en mi querida Recoleta. Es algo como muy de barrio. Y a mí, el barrio me roba el corazón. Es algo que no veo en Capital y sí veo en el oeste”, comenta El Bhadra, el artista oriundo de un barrio obrero de Santiago de Chile que tiró el ancla en el conurbano de Buenos Aires y “se siente como en casa”.

Dueño de una gran trayectoria que incluye colaboraciones con bandas y artistas de la escena del hiphop, el hardcore y el punk chileno, notas con Rolling Stone y discos que dieron vuelta por Latinoamérica, El Bhadra hoy hace carrera en el oeste y realiza conexiones entre su Recoleta natal y los distintos puntos de los barrios de la Provincia de Buenos Aires.

En La Ciudad, el artista chileno repasa sus inicios en la música, nos cuenta cómo era la Recoleta chilena (muy distinta de la porteña) de su infancia, rememora sus momentos de fama y reivindica el poder y el talento de barrio mientras se prepara con todo para lo que se viene.

¿De dónde sos? ¿Cuándo viniste a Argentina?

Yo soy de Chile, específicamente de Santiago, de la localidad de Recoleta, que no es como la Recoleta de acá, sino todo lo contrario: Es un barrio de gente obrera y luchadora. Allá hay un grito popular que dice “pito, mariguana y anfeta, somos de Recoleta”. El pito allá es el faso.

Cuando yo era chico, en los 90, mi barrio era muy periférico y era súper común ver a pibes metidos en el freestyle, bailando breakdance, en la cultura hip hop. Crecí con ese ritmo. Y, tanto mis padres como mis abuelos son de ese lugar. O sea, todo el barrio es familia.

A Argentina yo llegué en febrero de este año donde, luego de idas y vueltas, logré alquilar en el oeste, donde me siento muy cómodo. Ya soy un vecino más, me dicen “El Chile”.

¿Cuándo empezaste en el mundo de la música? ¿Cómo recordas ese primer acercamiento?

Empecé en la música a eso de los 13 años, cuando mi papá me regalo una guitarra acústica. Yo quería una eléctrica y él me dijo: “Apréndete Samba pa ti y Escalera al cielo y te compro la eléctrica”. Pasaron dos meses y tuvo que cumplir su palabra.

Después me encerré en el punk y el hardcore, género en el que tuve bandas de barrio y, en ese periodo, los viejos del barrio nos organizaban eventos para que fuera toda la población. Ahí tocábamos covers de Nino Bravo versión punk, por ejemplo.

Fue un primer acercamiento que recuerdo con un montón de amor y de cariño. A principios de los 2000 empecé a tener una banda con temas propios, como Alma de Sol, xresplandorx, In Our Hearts, Último Respiro. Eran bandas que terminaron siendo muy populares en el circuito hardcore y punk de la época.

Recuerdo que un día, cuando estaba con un grupo de amigos con el que tocábamos, cayó la banda Los Asuntos (una banda chilena de renombre) y nos vieron e incluso nos invitaron a ser sus teloneros. ¡Y fuimos! Fue algo hermoso. Grabamos un VHS que anda por ahí dando vueltas de la fecha. Era otra época, sin smartphones, redes sociales…Todo era a través del fanzine, del boca en boca, etc.

Después saqué algunos discos, me editaron en México, Argentina, Colombia. Incluso llegué a salir en la Rolling Stone. Una época muy hermosa.

“Defino mi trayectoria, simplemente, como una carrera artística mutable”, expresa El Bhadra.

¿Por qué El Bhadra? ¿Qué significa para vos ese nombre? ¿Cómo fue el inicio de tu carrera artística bajo ese nombre?

“Bhadra” viene del sánscrito y significa “terrible” a modo literal. Pero mi nombre completo es Bhadra Gopal Das, que significa que Bhadra (el terrible) es amigo de Gopal (una forma divina manifestada en niño) y que es robusto y malhumorado. Fue un nombre que obtuve porque, desde el 2004 al 2020 estuve muy metido con los Hare Krishna, y tuve un maestro que me dio el nombre luego de ciertas pruebas.

Después decidí no seguir con eso, pero mantuve el nombre. Mis amigxs, mis hijxs, todos me dicen Bhadra. Entonces, se convirtió en mi nombre, en lo personal y también en lo artístico, y creo que me representa bastante.

¿Cómo definirias tu trayectoria? ¿Cómo ves el nexo entre el rap/el hiphop y la militancia?

La defino como, simplemente, una carrera artística mutable. Siento mucho lo que ya dijo Salvador Allende: “ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica“. Yo vengo de familia de izquierda. Mi abuelo fue torturado y exiliado y lo que recuerdo de él es que me diga “En esta familia se acepta todo, excepto policía y uniformados“.

Hasta el día de hoy, en mi familia, preside eso. Mis hijxs saben que todo está permitido, excepto uniformados. La policía y la derecha, para mí, son el gran cáncer. Los odio con todo mi corazón. Y es algo que me sigue a donde vaya.

Por ejemplo, acá mis hijxs, cuando llegaron a Argentina, muchxs compañeritxs de la escuela lxs han bardeado por el tema de las Malvinas y eso de “Chile traidor”. Y no es algo tan así. No se conoce toda la historia completa. No se enseña acá lo que Chile estaba viviendo en ese momento, que era una dictadura. Los que apoyaron a los ingleses por las Malvinas fueron los militares, no el pueblo chileno.

Y hoy por hoy, en Argentina, me abandero con el pueblo argentino. Porque me recibieron, vivo acá, es mi casa y lucho por ella. Odio a los fachos que están acá en la actualidad y lo sostengo en todas las esferas de mi vida. Porque creo que no hay arte sin una postura social.

¿Cómo vivís el proceso creativo de tus canciones?

Mi proceso creativo es tóxico. No te voy a mentir, no te voy a decir que medito y todo eso. Porque la verdad es que, siempre que estoy en mis peores momentos, salen las mejores canciones. A veces la música la pienso y se la manifiesto a mi hermano de la música, El Infeli de Chile. Y ahí hacemos el beat.

La letra la hago desde mi corazón. Siempre ando con mi libreta y anoto mis ideas, luego la cuadro en canciones. Pero es un día a día.  A diario, a cada instante, pienso algo y lo escribo si me parece bueno. Así vivo mi proceso.

Es algo diario y, si no fuera por El Infeli y el Insecto Estudio que me plasma todo, no sé… Estaría bien mal sin ellos.

“Tengo mis propios principios a la hora de hacer colaboraciones con otros artistas. Uno de ellos es no hacer canciones con abusadores.”

El Bhadra acerca del trabajo conjunto con otros músicos.

¿Cómo fue el trabajo que realizaste en reiteradas ocasiones con otros artistas, tanto de Argentina como de Chile? ¿Cómo vivís esas confluencias de talentos?

Las colaboraciones siempre son un tema. A veces resultan, a veces no. Es como decidir entre tener un touch and go o tener una relación que perdure. Y todo depende de cómo junten las ideas.

Por ejemplo, tengo banda de temas con El Infeli y con otros solo uno. Incluso con otros artistas he borrado temas, por diferencias sociales o por mis propios principios. Por ejemplo, una de mis reglas es no hacer canciones con abusadores.

Acá en el oeste he conocido gente muy buena: Dejavu, Dj mokson, Fariaz, Skyluq, Arleka… Son grandes personas y que tienen compromiso con la música. El trabajo siempre es espontáneo y, a la vez, en busca de nuevos talentos.  Siempre hago colaboraciones con artistas que yo admiro. Y se dan por cosas de la vida, conversaciones que pasan en donde todo se une. Es algo mágico.

¿Cómo ves el arte en el conurbano? ¿Crees que existen diferencias con las zonas similares de Chile?

Yo me muevo por el oeste, pero también ando por Capital. Sin embargo, creo que en el conurbano el arte es muy local y está lleno de grandes posibilidades de crecer. El pueblo argentino es muy consumidor de lo que viene de Argentina. Es algo muy particular que no lo puedo explicar aún.

Es algo que traspasa al ámbito de la música incluso. Me pasa con muchos artistas graffiteros que son de acá del oeste y tienen muchísimo talento y son reconocidos en su área. A mí, la zona oeste me gusta mucho por el tema de los graffitis porque son elementos que dan personalidad al lugar. Y que, además, está muy en relación con el tema del hiphop y toda esa cultura.

En Chile pasa algo similar: Al yo ser de la zona norte, veía mucho graffitis hechos por gente del barrio que consumía ese tipo de música. Me siento muy feliz de estar en el oeste porque es como estar en mi querida Recoleta. Es algo como muy de barrio. Y a mí, el barrio me roba el corazón. Es algo que no veo en Capital y sí veo en el oeste.

“Hay mucha porquería dando vueltas en internet y que se escucha en el tren, en el bondi. En el mundo del hiphop, el trap, el rap está todo muy falso últimamente. Todos preocupados por las reproducciones, cuando esta música es otra cosa, es una cuestión de corazón.”

El Bhadra acerca del mundo del hiphop, el trap y el rap de la actualidad.

¿Cuáles son tus próximos proyectos?

Siempre estoy creando algo. Pero, actualmente, estoy trabajando en lanzar un EP que quizás salga en diciembre o en enero. Va a ser un material con canciones para que las piensen, más allá de “agitar el brazo”.

En febrero voy a estar lanzando también un video con colaboraciones de artistas argentinos y chilenos y que está grabado en los dos países. Es un trabajo muy hermoso que genera una conexión entre Buenos Aires y Santiago.

¿Qué consejo le darías a unx pibx que está queriendo empezar en el mundo del rap, el trap y el hiphop?

Yo ya soy un viejo… Pasé por otras cosas: El hiphop y el punk de barrio, un momento de fama… y ahora creo que está todo muy falso. Amigos del rap, trap y hiphop: ¡Que les chupe un huevo las reproducciones! Eso no es el rap, ni el trap ni el hiphop. Es otra cosa, una cuestión de corazón, hermanos.

Hay que hacer lo que uno quiera y las reproducciones ya vendrán. Si tu material es mierda, no te van a escuchar. Si tu material se difunde, se va a escuchar. Hay mucha porquería dando vueltas en internet y que se escucha en el tren, en el bondi. Pero creo fervientemente que (y este es mi mayor consejo) el primer fan siempre tiene que ser uno mismo. Yo soy mi mayor fan y, si no lo fuera, no podría hacer todo lo que viene por delante. Hay que apreciar el propio trabajo y el propio esfuerzo, creerse un poco el cuento. E intentar estar satisfecho con lo que uno hace.

whatsapp logo