De Fuerte Apache a la política: la historia de Liz Díaz
Si bien es verdad que la constitución habilita a que cualquier ciudadan@ tenga la posibilidad de presentarse a elecciones, la realidad no es tan lineal. En general, son las personas provenientes de familias adineradas quienes se acercan al universo de la política, pese a que poc@s conocen efectivamente las dinámicas que se dan en las zonas más vulnerables del país. En los últimos tiempos, fueron cada vez más l@s dirigentes surgidos de barrios populares que se animaron a combatir esta dinámica y, en este sentido, Liz Díaz es un claro ejemplo. Esta vecina del partido de Tres de Febrero nació y se crio en Fuerte Apache y dio pasos sólidos en el peronismo provincial y municipal. Su gran anhelo es convertirse en intendenta de la localidad en el futuro inmediato y, de esta manera, superar todo tipo de estereotipos. En esta oportunidad, desde Diario La Ciudad, relataremos algunos detalles de su historia de vida.
Esta mujer empezó con su vida militante en 2004, cuando se sumó al programa “Encuentro” que proponía una serie de acciones vinculadas con la alfabetización en barrios populares. A partir de este momento, comprendió que el verdadero cambio que necesitaba la sociedad implicaba un involucramiento mayor en cargos jerárquicos, por lo que se desarrolló en distintas áreas del Estado provincial, en el Congreso de la Nación y como concejal del partido de Tres de Febrero.
En 2023, en el marco del proceso electoral local, Liz Díaz obtuvo un fuerte respaldo por parte de sus compañer@s y decidió presentarse como pre-candidata a intendenta por Unión por la Patria. Más allá de que no pudo imponerse en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), se convirtió en una de las primeras mujeres en disputar este puesto tan relevante.
De acuerdo a su opinión, uno de los reclamos que se hacen más presentes entre l@s vecin@s de Tres de Febrero, fundamentalmente al interior de los barrios populares, tiene que ver con la seguridad. Asimismo, considera que hay una enorme falencia en relación a un proyecto vinculado con el desarrollo industrial en la localidad.
Liz Díaz sostiene que, a diferencia de lo que sucedía en tiempos anteriores, la actualidad marca que much@s militantes de organizaciones populares se han animado a jugar en serio en la política. En este sentido, sostuvo que “muchas veces sentí, mirando para atrás, que la militancia que hacía era una militancia social que para la política no era prioritaria y sin embargo es desde ahí que nosotros podemos potenciar la participación de la comunidad. Somos nosotr@s quienes hacemos política, quienes tenemos que salir a buscarlos, a abrazarlos”.
Liz Díaz es, sin lugar a dudas, un enorme ejemplo de que las nuevas dirigencias pueden surgir de las zonas más postergadas. Solo en el futuro conoceremos cuál es el lugar que puede ocupar esta mujer en un peronismo que se encuentra en medio de un proceso de reconstrucción de sus liderazgos. Ella, por su parte, parecería estar lista para dar un salto cualitativo en el municipio de Tres de Febrero.
