Escritorxs del Conurbano: Hoy, Federico Monserrat

Escritorxs del Conurbano: Hoy, Federico Monserrat
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El arte, más que un negocio, es un espacio común para compartir experiencias con otras personas, acortar distancias y crear cosas nuevas”, sostiene Federico Monserrat (también conocido como “Feche”) escritor oriundo de Ituzaingó, quien además se desempeña como Ingeniero Industrial y docente universitario.

Junto a la editorial Niña Pez Ediciones, Federico Monserrat participó de la antología de terror y suspenso Entre giros y sombras. Vol. II”, en donde se encuentra el cuento del ituzainguense denominado “Tornado 2012 (esta vez en Ituzaingó)”, que relata la experiencia del escritor en la particular tormenta que sacudió tanto a esta localidad como a muchas otras.

Posteriormente, Federico Monserrat participó de una recopilación de cuentos cortos de terror y misterio pertenecientes a autores de distintas partes del mundo, agrupados en el libro “100 razones para no dormir esta noche”, publicado por Rubin Editorial.

En La Ciudad, el autor de Ituzaingó repasa sus primeros pasos en la literatura, tanto como escritor como lector, comenta su experiencia en las antologías mencionadas, rememora su pasado como entrevistador en revistas de artes marciales y escritor de canciones para bandas de la adolescencia, a la vez que esboza sus futuros proyectos en el mundo de las letras.

¿Cómo fue ese inicio de relación en el mundo de la escritura?

Mis primeros escritos surgieron cuando estaba empezando la secundaria, a los trece años más o menos. En ese momento, ya intercalaba entre letras de canciones y algunos relatos cortos que funcionaban como una especie de fusión entre diario personal y textos para compartir.

Escribir era la forma que encontré de comunicarme conmigo mismo y que, a la vez, servía de excusa para acercarme a los demás con un tema de conversación. Podría decir que la escritura fue algo clave en mi adolescencia.

¿Cuál fue el primer libro que recordás haber leído? ¿Qué impresiones te llevás de ese primer encuentro?

El primer libro que recuerdo haber leído por placer fue “La isla misteriosa, de Julio Verne. En la escuela primaria nos hablaron del autor y del tipo de historias que contaba, entonces recordé que ese libro estaba en la biblioteca de mi casa (aunque nunca le había prestado atención hasta entonces) y empecé a leerlo en cuanto volví de clase.

Me parecía alucinante que el autor hubiera podido anticipar en la ficción muchas cosas que después se hicieron realidad, mezclando así el realismo con la ciencia ficción y hasta algo de futurología. Las descripciones de los lugares, los personajes y los acontecimientos, me hacían viajar a esa isla y ser testigo “real” de todo lo que pasaba en la historia. Mientras más avanzaba con el texto, más ganas me daban de seguir leyendo. A partir de ese momento me empecé a interesar por la lectura.

En la antología “Entre giros y sombras. Vol. II” de Niña Pez Ediciones se encuentra el cuento “Tornado 2012 (esta vez en Ituzaingó)” escrito por Federico Monserrat.

¿A quiénes considerás tus “referentes” en lo literario? ¿Cuáles son tus influencias?

Me gusta leer de todo y cualquier tipo de género: cuentos, novelas, poesías, relatos, transcripciones de entrevistas, hechos reales, política, economía, filosofía, ciencia ficción, fantasía… Si tuviera que elegir quienes me marcaron con más de una obra de cada uno y a quienes admiro por su trabajo, podría nombrar a Julio Verne, Dan Brown y Julio Cortázar. La ciencia ficción, el misterio, lo surrealista y sus combinaciones con el realismo son algunas de las cosas que me parecen más interesantes e inspiradoras.

¿Cómo dialoga tu formación en ingeniería industrial y docencia en tu faceta como escritor? ¿Creés que haya alguna confluencia entre ellas?

Sin dudas, existe una confluencia entre mi faceta como escritor y como profesional. En la cátedra en la que trabajo como parte del equipo docente, hacemos mucho énfasis en la importancia de la escritura. Esto es tanto para comunicar, como en la modelización de las ideas propias.

Al estar trabajando constantemente desde esta perspectiva y corrigiendo los documentos escritos de mis alumnos, puedo ver diferentes tipos de escritura, diferentes perspectivas de una misma idea y seguir nutriéndome permanentemente. Creo que hay un ida y vuelta muy interesante entre lo que puedo llegar a transferirle a los alumnos y lo que ellos me acercan durante todo su proceso a lo largo del año.

¿Y con tu faceta más “periodística”? ¿Qué podés decirnos de aquellos años redactando y entrevistando en la revista de artes marciales? ¿Cómo llegaste a ese mundo?

En cuanto a mi faceta periodística, prácticamente no se vinculó con mi parte profesional porque cuando eso sucedió, apenas estaba empezando a cursar la carrera de ingeniería en la universidad y mis trabajos aún no tenían que ver con el rubro.

De todos modos, es algo que me gustaría retomar en algún momento, porque me encanta todo lo referido a los medios de comunicación. Ya desde chico jugaba a trabajar en una radio o a entrevistar personas. Creo que los medios de comunicación como estos todavía tienen algo especial que no se logra con las redes sociales ni con otros medios y es el sentido de pertenencia. Sentimiento que se genera, tanto por parte de quienes los realizan, como por parte de quienes los consumen.

En aquellos años en que escribía para la revista digital de artes marciales, lo hice por invitación de mi maestro de HAM DO. Yo había entrenado con él y realizado algunas capacitaciones durante algunos años, así que sabía de mi gusto por la escritura y de mi perfil inquieto y preguntón.

Respecto a los materiales “Entre giros y sombras Vol. II y 100 Razones para no dormir esta noche, ¿cómo fue el proceso de escritura, edición y publicación estas antologías donde se encuentran tus cuentos? ¿Cómo fue el trabajo con otros colegas y las editoriales?

Me enteré de las convocatorias por haber visto las publicaciones en las respectivas redes sociales de cada una de las editoriales. Los procesos fueron similares: publicaron las bases y condiciones de la convocatoria, elegí los cuentos que cumplían con los requisitos de temática y extensión, les hice una última revisión y los envié para participar de la selección. Después de un tiempo, me llegaron las confirmaciones de los cuentos que habían sido elegidos y comenzaron los procesos de edición propiamente dicha.

La comunicación con las editoriales es principalmente por mail y no tengo contacto directo con el resto de los autores, aunque en algunos casos, nos contactamos por nuestra cuenta y creamos vínculos para intercambios y apoyo. Todo el trato por parte de las editoriales es super respetuoso y cordial. Se nota la predisposición que tienen y es un placer poder contar con estos espacios autogestivos y colaborativos para poder tener un medio que nos ayude a llegar a los que todavía no tenemos tanta experiencia, tantos recursos o aún no nos animamos a apostar por un desafío más grande.

Lo último de Federico Monserrat puede leerse en la antología “100 Razones para no dormir esta noche”.

¿Dónde pueden conseguirse los libros “Entre giros y sombras Vol. II y 100 Razones para no dormir esta noche?

Ambos libros publicados se pueden conseguir desde cualquier parte del mundo en formato digital y en algunos puntos en formato impreso, accediendo a la tienda de Rubín editorial o en la página de Niña Pez Ediciones. También pueden escribirme directamente por Instagram en @fechemonserrat.

¿Por qué decidiste enfocarte en escribir cuentos de terror? ¿Cómo fue la experiencia de adaptar al registro literario lo vivido en el tornado del 2012?

En realidad, no sé si es terror lo que escribí hasta ahora. Creo que algunos textos son registros de la realidad y otros tienen algo de realismo mágico. En ese aspecto, me gusta pensar que no se nota la diferencia entre unos y otros. Me interesé en esta clase de relatos porque me gusta contar historias reales y situaciones que podrían ocurrir en la vida real, describiendo cómo podrían sentirse las personas que estuvieran viviendo esas cosas; en estos casos, con el miedo, la impotencia y la ansiedad.
Quise registrar lo que me pasó durante el tornado de 2012 porque es una anécdota que conté muchas veces de forma verbal y varias personas descreían de algunas de las cosas que cuento y me decían que exageraba, pero en la mayoría de los casos (incluso por parte de los incrédulos), notaba cómo se iban enganchando en la historia y asombrándose de los hechos. Incluso algunas personas me pedían que les volviera a contar lo que pasó o que se lo contara a otras personas. Todo eso me motivó a querer volcarlo al papel y compartirlo con más personas.

¿Qué pensás del ambiente literario del oeste? ¿Crees que, en el mercado editorial, lxs escritorxs del conurbano están ganando terreno?

Creo que en estos últimos años se está activando algo muy bueno, no solo con lo literario, sino con todo lo artístico en general. Muchos nos estamos animando a dar el salto, a salir de nuestros cuadernos y garajes para estar un poco en las casas de los demás, un poco viajando por otros pagos y, sobre todo, compartiendo esto que nos une. Además, la tecnología ayuda muchísimo a que algunas de las cosas que antes eran barreras, hoy ya no lo sean. Es realmente un orgullo y un placer poder encontrar a artistas del oeste en ferias literarias, festivales de música, muestras de fotografía y demás expresiones artísticas; incluso en redes sociales y plataformas digitales.

De tu propio material, ¿cuáles son tus escritos favoritos y por qué?

Esta es una pregunta muy difícil porque soy muy crítico conmigo mismo. Si tuviera que elegir (además de los cuentos publicados, que realmente son de mis preferidos), podría mencionar a las primeras canciones que no solo escribí, sino que llegué a tocar con alguna de las bandas de mi adolescencia. Quizás no sean textos muy elaborados ni canciones pegadizas, pero marcaron una etapa de mi vida en la que inició esta creatividad, la pasión por la escritura y eso me permitió compartir muy buenos momentos con amigos, conocer gente y crecer como persona. Todavía guardo muchos de esos escritos originales y cada tanto comparto alguna interpretación de esas canciones en mis redes sociales.

¿Cuáles son tus próximos proyectos?

Ahora estoy trabajando en varios proyectos: Por un lado, estoy retomando la publicación de contenido en mi página de cafecito. Ahí pueden encontrar de forma gratuita frases, poemas, cuentos cortos y otros textos, además de poder colaborar con la realización del resto de mis proyectos.

Por otro lado, hay otros dos cuentos míos inéditos que fueron seleccionados para una nueva antología de romance de Rubin Editorial. El libro va a estar saliendo para el día de los enamorados.

Por último, estoy trabajando en conjunto con un productor musical, también del oeste, con quien estoy grabando algunas canciones que escribí y las voy a compartir próximamente, una vez que estén finalizadas.

¿Qué consejo le darías a unx escritorx del conurbano que quiere comenzar a publicar sus escritos?

Que se anime, que no se censure, que comparta con otros, que se rodee de personas que también disfruten del arte y que deje que las cosas fluyan. No hace falta pensar en publicar directamente una novela best seller, sino que alcanza con compartir lo que sea que les nazca como producto.

En lo personal, no disfruto tanto del arte si lo pienso como negocio, sino como un espacio común para compartir experiencias con otras personas, acortar distancias y crear cosas nuevas.

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