Kamet, el autobar de Ituzaingó que mantiene la tradición de la década de los 90
Santiago Menu
En la década de los 90, era muy común que las personas acudan con sus vehículos a espacios al aire libre para disfrutar de una película y consumir alguna bebida o snack a solas. Con el paso del tiempo y la llegada de propuestas innovadoras, esta modalidad dejó de utilizarse. Sin embargo, en el municipio de Ituzaingó, Kamet mantiene esta tradición y recibe de manera diaria a un sinfín de clientes que buscan rememorar épocas pasadas. En tiempos de pandemia, este espacio fue uno de los pocos en estar habilitados a partir del distanciamiento que proponían y en los años siguientes tuvieron un crecimiento digno de ser narrado.
Kamet es el único autobar que queda en pie en la República Argentina, por lo que personas de todas partes de Buenos Aires se acercan allí en la búsqueda de una experiencia diferente. De acuerdo a algunos registros, en la década de los 90, llegaron a existir alrededor de 80 locales.
La lógica de Kamet es clara y cada una de las personas que asiste a este lugar la sigue a la perfección: el auto entra a este espacio, estaciona y para poder llamar a algun@ de los moz@s, pone las balizas. Una vez que esto sucede y se advierte por l@s responsables, se toma el pedido. L@s clientes pueden quedarse en el auto o bajar y sentarse en las sillas y mesas dispuestas en cada box.
De acuerdo a algunos relatos de las personas que tomaron las riendas de este local, la mayor cantidad de personas que asisten a estos espacios son parejas que no tienen la posibilidad de convivir y no tenían dónde encontrarse, por vivir con sus hijos. Es por esta razón que buscan allí un momento de intimidad.
No caben dudas de que en tiempos de pandemia, en los cuales la mayoría de los locales gastronómicos tuvieron que cerrar, este autobar pudo hacerle frente a los momentos más complejos y aún se mantiene en pie. En 2020, la modalidad de take away también estuvo presente en el negocio.
Kamet es uno de los pocos espacios que resiste a los embates que proponen la nueva lógica de modernidad. Mediante una propuesta clásica, convoca a cada vez más personas que buscan revivir una etapa pasada. Si pensas en una alternativa a cualquier restaurante, este espacio emblemático establecido en Parque Leloir es ideal. Su popularidad crece conforme pasan los años y promete mantener viva la llama en la zona oeste de la provincia de Buenos Aires.