Ituzaingó: secuestro a su ex esposa a punta de pistola, la policía lo detuvo y la justicia lo liberó al otro día.
Diario La Ciudad
La justicia de Morón liberó a un hombre al que la policía detuvo el domingo a la madrugada por amenazar de muerte a su ex pareja, llevarla a su casa a punta de pistola y luego robarle su teléfono celular por el solo hecho que la mujer había decidido romper la relación debido a las agresiones verbales sufridas en contexto de violencia de género.
El hecho sucedió el sábado a las 21.30 cuando la víctima de 23 años caminaba por la calle Almagro y Peredo del barrio de San Alberto,y de manera repentina es sorprendida por su expareja.
Según pudo saber La Ciudad, el agresor al ver caminando a la mujer y ante la negativa de que ella vuelva con él, frenó la moto, sacó un arma de fuego y disparó un balazo al aire para amedrentarla y que vuelva a la relación sentimental.
La mujer después cuenta que accedió para ir a la casa de éste y en medio de una discusión le robó su teléfono celular para que no llamara a su familia dejándola sola encerrada.
La mujer tras el ataque logró escapar de la casa donde estaba encerrada y pudo llegar a la casa de su hermana, donde ambas alertaron a la policía sobre lo sucedido.
La detención de solo unas horas
La Fiscalía de Violencia de Genero 10 de Morón ordenó allanamientos para la captura del agresor en dos domicilios de Ituzaingó bajo la causa “robo agravado y amenazas con arma de fuego mediante contexto de violencia de género. Portación ilegal de arma de fuego no habida”.
En uno de los allanamientos a cargo de la Comisaría 4ta de San Alberto se secuestró un revolver calibre 22 corto sin numeración y otra arma de fuego calibre 32a. El hombre fue llevado a la sede policial y puesto a disposición de la justicia. “Los policías llegaron al lugar allanado tras el geolocalización del teléfono celular robado a la mujer”, aclaró el informante a La Ciudad.
El agresor solo tuvo una medida de restricción
El Juzgado Garantías 1 de Morón ordenó que la fiscalía proceda a la libertad del agresor bajo al medida de una restricción perimetral para con la ex pareja. No puede acercarse a la mujer por un radio de 500 metros a la casa de la víctima y su trabajo. No tener nada de contacto con la víctima por 90 días y abstenerse a cualquier agresión tipo verbal y físico e psicológico para con la víctima.
“El trabajo de la policial para atrapar al violento no alcanzó y la mujer que denunció quedó ahora más expuesta a otro ataque. Las víctimas de violencia de género ahora dudan en hacer denuncia por Violencia de Género”, contó un vecino del barrio San Alberto a Diario La Ciudad.