“La Fisura”: La histórica murga de Morón Sur festejará sus trece años este fin de semana
Melina Alderete
“Nosotros no elegimos armas para llevar a cabo una lucha; elegimos bombos, platillos, cantar, bailar. Y creemos que es parte de seguir dando pelea. La salida es artística y colectiva, nos tenemos que juntar todos los proyectos y seguir ocupando los espacios”, afirman desde la murga La Fisura, el proyecto moronense que nació en los barrios hace ya trece años y que, aún en los tiempos difíciles de la actualidad, continúan llenando las calles de alegría rebelde y crítica social.
Este fin de semana, La Fisura festejará sus trece años de trayectoria con una celebración por partida doble el sábado 13 y el domingo 14 de enero a partir de las 18 en la Plaza Rucci (García Silva y Río Piedras) de Morón, con artistas invitados, un buffet a precios populares y una feria autogestiva.
La Ciudad conversó con La Fisura acerca de sus inicios en las calles del Barrio La Base, la identidad moronense, la situación actual del país respecto a los ataques sistemáticos a la cultura, y los preparativos para el festejo del fin de semana.
¿Cómo y cuándo nació la Murga La Fisura?
La murga formaba parte del proyecto “Jóvenes en construcción”, que fue una organización de Morón que finalizó en enero del 2011. Cuando culmina el proyecto de Jóvenes, la murga quedó en el barrio hasta el día de hoy, empezando sus actividades como proyecto formal el 8 de enero del 2011.
Puntualmente, la idea de llevar a cabo la murga nace de un taller, de juntarnos en un comedor y tener años de estar en el barrio, apoyando a distintas causas que están pasando en nuestras calles del Barrio de La Base.
La Fisura está compuesta por gente a la que le gusta hacer arte, disfrutar de la cultura y considerarla nuestro cable a tierra. Al mismo tiempo, quienes integramos la murga, buscamos hacer una crítica social muy fuerte. Nos gusta juntarnos y estar con la gente en la calle, como tiene que ser.
Como proyecto, creemos que hacer un corso, en el barrio, y que sea algo gratis para todxs es lo más importante: Ver a la gente disfrutando es lo que nos llena. También el compartir con otras murgas y/o corsos, poder ver a otros proyectos que están en la misma que nosotrxs, con la misma premisa.
¿Por qué eligieron ese nombre?
En su momento, se eligió el nombre en el taller donde se originó la murga. En esos inicios, ensayábamos los domingos temprano y empezamos a decirnos en chiste que éramos “unos fisuras”, porque nos juntábamos a ensayar “pasados de rosca”, después de haber salido el fin de semana. Entonces, adoptamos el nombre de “Los Fisuras”.
Con el tiempo, quisimos cambiar nuestra identidad porque sentíamos que no mostraba lo que realmente queríamos representar. Pero, al mismo tiempo, nos gustaba la idea de considerarnos como una fisura, una grieta en el paredón de la sociedad: Lo que no gusta, lo que incomoda, pero sigue estando ahí. Entonces, a partir de esta metáfora, decidimos cambiar de nombre y pasar a ser “La Fisura”.
¿Cómo es el anclaje de “La Fisura” en Morón? ¿Cómo dialogan con la identidad del oeste?
Y…el barrio, es el barrio. Cuando empezamos, solíamos estar en la Placita del 20, en Patagones y Arana. Pero después comenzamos a instalarnos a la Placita del Gas o Plaza Rucci, más en el centro de Morón. O sea, cambiamos de plaza y barrio, pero nunca de partido.
Respecto al oeste, también sentimos una cuestión identitaria muy fuerte. Nosotros somos siempre de Morón, siempre del oeste. Por ejemplo, cuando vino Ramiro Tagliaferro a la intendencia y quiso prohibir los corsos, nos juntamos todas las murgas de Morón y La Fisura comenzó a participar de la zonal de murgas, del movimiento regional y también nacional de murgas, entendiendo que siempre es una cuestión colectiva, de grupalidad. Porque la unión hace la fuerza.
¿Cómo definirías la trayectoria de La Fisura en estos trece años?
La trayectoria no se puede definir con otra palabra que no sea “excelente”. Fueron años hermosos, con un montón de idas y vueltas, como toda grupalidad. Por ejemplo, cambiar de barrio fue todo un golpe para la murga. Pero son decisiones colectivas, las cuales se debaten y se charlan demasiado. Siempre apelamos a la organización y al diálogo.
Además, en estos años, logramos construir una identidad y una personalidad propia como colectivo. Cada una de las personas que integran la murga, sabe cómo piensa y lo que opina La Fisura. Tenemos muy en claro hacia dónde vamos. Entendemos que el camino es largo, pero estamos. Y eso es lo importante.
Dada la situación actual de nuestro país, con el avance de la derecha y los ataques a la cultura por parte del gobierno nacional, ¿cómo se posiciona La Fisura como murga autogestiva y barrial?
En el contexto en el que vivimos, desde La Fisura decidimos luchar. No hay otra opción. Estamos participando de grupos de WhatsApp para mantenernos conectados e informados con la gente de Morón; también participamos activamente de los distintos cacerolazos que se realizan todos los jueves a las 19:30 ahí en la Plaza San Martín, llevando nuestros instrumentos y haciéndonos escuchar.
Hacer el corso, en esta actualidad, es duplicar la lucha y las fuerzas: Con el protocolo anti-protesta, que pretende que notifiquemos si somos más de tres personas las que se van a reunir en un espacio público, nosotros vamos y nos reunimos con la gente en la calle, sean los que tengan que ser.
Por otro lado, ser una murga autogestiva en estos tiempos también es muy difícil en cuanto a lo económico, porque todo aumenta y hay que organizarse para armar bien un festival, un festejo, pagar micro, banderines, luces y otros materiales necesarios para que la murga, como grupalidad, pueda seguir. De todos modos, le seguimos poniendo garra porque consideramos que hoy, más que nunca, hay que estar en las calles.
La batalla cultural, a nivel sociedad, la estamos perdiendo. Ese es el análisis que hicimos con La Fisura. Porque, si ganó la presidencia un tipo como Javier Milei, las canciones y los trabajos de todos los artistas de distintas disciplinas, evidentemente no llegaron. Nosotros no elegimos armas para llevar a cabo una lucha; elegimos bombos, platillos, cantar, bailar. Y creemos que es parte de seguir dando pelea. La salida es artística y colectiva, nos tenemos que juntar todos los proyectos y seguir ocupando los espacios. Porque es muy necesario que la gente esté en la calle no sólo luchando, sino también disfrutando del laburo de lxs artistas.
¿Cómo será el festejo de este fin de semana por los trece años de La Fisura?
Hay que festejar, hay que celebrar y estar en las calles con la alegre rebeldía, ocupando los espacios que nos corresponden.
Hace semanas que estamos todxs a pleno, preparándonos para armar un muy buen corso para que los vecinos y las vecinas de Morón puedan acercarse y disfrutar de un fin de semana distinto. En ese sentido, también apostamos a los precios populares en cuanto al buffet que formará parte de los festejos del 13 y 14 de enero.
Además, en ambas fechas nos acompañarán otros proyectos con artistas increíbles, como La Guarnición, un ensamble de vientos que viene desde Ituzaingó; también Lala Ska, que viene desde Moreno; La Candomgluck de Hurlingham; y muchas murgas de Merlo, Ferrari, de zona sur, un DJ con vinilos…Todo muy completo.
Por otra parte, como siempre apelamos a la autogestión, invitamos a una feria para que la gente pueda vender lo que hace y mostrárselo al público.
El festejo por partida doble por los trece años de la murga La Fisura será los días 13 y 14 de enero a partir de las 18 en la Plaza Rucci (García Silva y Río Piedras) de Morón.