La historia de Campanópolis, la aldea medieval instalada en el centro de González Catan
A tan solo media hora de distancia de la ciudad de Buenos Aires y en el centro de González Catán, una de las localidades más pobladas dentro del municipio de La Matanza, se instaló una atracción que conserva algunas tradiciones arquitectónicas de la edad medieval. Cada fin de semana miles de personas acuden a Campanópolis y se sorprenden con las diferentes propuestas que se presentan en uno de los lugares más increíbles que se pueden encontrar en la provincia de Buenos Aires. Frente a la popularidad que presenta este espacio, resulta necesario entender la historia de esta pequeño proyecto y las razones por las cuales atrae a cada vez más personas.
En 1976, Don Antonio Campana se ilusionó con crear una aldea abierta a la comunidad que pueda representar buena parte de la vida por aquellos tiempos. Sin tener estudios concretos en materia de arquitectura, adquirió un predio de 200 hectáreas que contaba con llanuras, bosques selváticos, ríos, arroyos y lagos. Antiguamente este lugar era utilizado como tosqueras y fue en este espacio donde salieron materiales que posteriormente fueron trasladados a la construcción de las bases de las pistas del Aeropuerto Internacional de Ezeiza y de la autopista Richeri. Como si esto fuera poco, el desafío para este hombre fue mayor producto de también sirvió como relleno sanitario por el CEAMSE. No obstante, su sueño pudo verse plasmado.
Una de las grandes características que tiene este espacio es que fue elaborado con materiales reciclables, lo que representa un dato que lo diferencia de todas estas clases aldeas alrededor del planeta. La idea fue recuperar buena parte de lo que ya había en este lugar y transformarlo en algo especial.
Cabe destacar que Campanópolis está compuesto de dos partes: una aldea de 12 casitas del bosque y Villanueva, una zona más alejada donde el surrealismo es la clave. Fuentes, lagos, puentes, pasajes, cabildos, molinos de viento, capillas, locomotoras y museos son algunas de las cosas que se pueden encontrar allí.
Para poder visitar Campanopolis es necesario hacerlo a través de visitas guiadas. Estos recorridos se pueden hacer todos los días entre las 9 a 13 y de 13: 30 a 17. La entrada general cuesta alrededor de $2000, mientras que l@s niñ@s ingresan de manera gratuita. En González Catán se encuentra un espacio que intenta recuperar la historia y sorprender a cada un@ de los visitantes.
