Las Pastillas del Abuelo festejaron sus dos décadas en Ituzaingó
María Josefina Severino
El pasado sábado, la banda de rock Las Pastillas del Abuelo (LPDA) se presentó ante un público extasiado que asistió al Microestadio del Club Gimnasia y Esgrima de Ituzaingó (GEI), ubicado en Lavalle 1151. Luego de una previa a cargo del grupo Eppurse Muove, de Ramos Mejía, los músicos subieron al escenario para calmar las ansias de lxs fans.
El show, que forma parte de la gira por los 20 años de la banda oriunda del barrio porteño de Balvanera, comenzó alrededor de las 22 horas con uno de sus clásicos. “Amar y envejecer” del disco Las Pastillas del Abuelo (2006) fue el tema elegido para abrir el recital en el microestadio que tiene capacidad para alrededor de mil personas.
Durante dos horas, Juan Germán “Piti” Fernández (voz y armónica), Alejandro Mondelo (teclado y coros), Juan Comas (batería), Fernando Vecchio (guitarra), Santiago Bogisich (bajo), Joel Barbeito (saxofón y coros) y Diego “Bochi” Bozzalla (guitarra y coros), deleitaron a sus fans con un repertorio que incluyó canciones icónicas de la banda. De esta forma, interpretaron desde temas de su primer disco, Por Colectora (2005) hasta su último sencillo “Dulce”, lanzado en septiembre pasado junto a Abel Pintos.
Un repertorio que reflejó los 20 años de historia de LPDA
A continuación del primer tema, la banda tocó “Historias” (Las Pastillas del Abuelo), “Inmediatez” (canción estrenada este año), y “Cerveza” (Por Colectora). Luego fue el turno de una retrospectiva a su disco Paradojas (2015) con “La Creatividad” y a la época pandémica con “Interpretación”, incluida en el álbum 2020 (2020).
Tras “Desde la postura” (Las Pastillas del Abuelo) y “El fondo de tu vida!” (Desafíos, 2011), llegó una seguidilla de canciones de Crisis (2008). Con “Qué es Dios?”, tema dedicado a Diego Maradona, el GEI se llenó de pasión futbolera. “Muchas gracias, señor Dios. Muchas gracias señor Diez”, entonó el público mientras las pantallas mostraban banderas argentinas y fotos del astro del fútbol.
Del disco lanzado en 2008, LPDA también interpretó “Me juego el corazón?”, “Dónde esconder tantas manos?”, “Qué hago yo esperando un puto as?” y “Preposiciones”, esta última incluida en el álbum de estudio como “Qué pretendo no saber?”
La primera parte del repertorio se completó con “Locura y realidad”, “Tantas escaleras” y “Enano” (Las Pastillas del Abuelo); “El favor” (2020); “Ojos de dragón!” (Desafíos) y “Skalipso” (Por Colectora).
Chequeado: en el Oeste está el agite
Cuando parecía que el recital llegaba a su fin, subió al escenario “Perico”, amigo de la banda. “Como en todo cumpleaños siempre hay invitadas, invitades, invitados. En este caso son ustedes con la cuota agitera del Oeste”, expresó.
Así, luego del “falso final” de todo concierto, el público entonó el feliz cumpleaños, automáticamente seguido por un: “Olé, olé, olé. Olé, olé, olé, olá. Olé, olé, olé, cada día te quiero más. Soy pastillero, es un sentimiento no puedo parar”.
Con esta hinchada como aliento, LPDA volvió al escenario para interpretar las últimas dos canciones. Los acordes inconfundibles de “Viejo Karma” (Desafíos) aumentaron en el GEI la euforia que llegaría a su pico máximo minutos después.
Al terminar de cantar, y mientras seguía la parte instrumental de la canción, Piti bajó del escenario y se acercó a quienes se encontraban en las primeras filas del público. Inmediatamente, comenzaron las primeras notas de “Otra vuelta de tuerca”, tema infaltable en un recital de LPDA. De esta forma, la banda coronó la noche con un clásico, dejando más que satisfecho al público ituzainguense.
Foto de portada: La Ciudad