Corita Café se presenta como una extensión de esa filosofía de vida. Según relatan sus fundadores, cada rincón está diseñado para transmitir lo que esta pequeña gran luchadora les regaló: la capacidad de disfrutar las pequeñas cosas.
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En el mundo de la gastronomía, a menudo se dice que los mejores lugares son aquellos que tienen "alma". No se trata solo de la técnica del barista o de la calidad del grano, sino de la historia que sostiene las paredes del lugar. En Ituzaingó, acaba de nacer una propuesta que lleva esta premisa al extremo más tierno y conmovedor: Corita Café.
Este nuevo espacio no nace de un estudio de mercado, sino de una "lucha de amor". Su musa inspiradora no es un chef de renombre, sino Cora, una pequeña bulldog francés que ha enseñado a sus dueños —y ahora a sus clientes— el verdadero significado de la fortaleza.
La musa de cuatro patas
La historia detrás de la marca es tan cruda como esperanzadora. Cora llegó a su familia a través de la adopción siendo apenas una cachorra, pero su vida estuvo marcada tempranamente por desafíos médicos severos: EPOC, insuficiencia cardíaca y pulmonar, y diversas cirugías características de su condición braquicefálica.
Sin embargo, el punto de inflexión que define el espíritu de este café ocurrió ante la sospecha de un cáncer. Para salvarle la vida y descartar metástasis, fue necesario amputarle una de sus orejitas. Lejos de rendirse, Cora se recuperó con una vitalidad envidiable, convirtiéndose en el símbolo viviente de que, a pesar de las adversidades, siempre hay espacio para la alegría.
Un menú con propósito
Corita Café se presenta como una extensión de esa filosofía de vida. Según relatan sus fundadores, cada rincón está diseñado para transmitir lo que esta pequeña gran luchadora les regaló: la capacidad de disfrutar las pequeñas cosas.
La propuesta gastronómica promete ser reconfortante. El lugar se define como un espacio para:
Celebrar la unión: Con opciones pensadas para compartir, celebrando la amistad y la familia.
El ritual del encuentro: Ya sea con un café de especialidad o un buen mate (un detalle que ancla la propuesta en nuestra identidad local), la idea es que cada sorbo se sienta como "un abrazo en forma de taza".
Sabores caseros: Se espera una pastelería y bocados preparados con dedicación, buscando evocar esa sensación de "hogar" al cruzar la puerta.
Una invtación a descansar en Corita Café
Coordenadas del corazón
Ubicado en el jardín del oeste, (Fragio 234, Ituzaingó), Corita Café no solo abre sus puertas para servir desayunos o meriendas; abre un espacio para quienes buscan bajar un cambio, respirar y valorar el momento presente.
Es una invitación a detenernos en la vorágine diaria. Como bien reza su manifiesto fundacional: "La verdadera fortaleza no siempre se mide en tamaño, sino en la capacidad de superar las dificultades con ternura y alegría".
Para los vecinos de Ituzaingó y los amantes de las historias con final feliz, este nuevo spot promete ser una parada obligatoria. Porque al final del día, el café sabe mejor cuando está condimentado con una buena historia de amor incondicional.