El Bar de Laurenti, un clásico de Moreno en el siglo XX
La Argentina tiene una larga tradición en materia gastronómica, aunque se destaca fundamentalmente por la costumbre que poseen las personas por encontrarse en los diferentes bares que pueblan las ciudades más relevantes del país. Es sumamente común encontrar reuniones de personas en estos espacios para discutir acerca de trabajos, trámites, problemas familiares y demás temáticas. En el municipio de Moreno, este ritual continúa y much@s vecin@s recuerdan con una sonrisa en su rostro el rol que cumplió en el barrio el Bar de Laurenti durante buena parte del siglo XX. En esta oportunidad, desde Diario La Ciudad, contaremos algunos detalles de este local que se ganó el corazón de prácticamente toda una localidad a fuerza de tragos, comidas y mucha actividad social.
De acuerdo a algunos relatos de personas que transitaron por este lugar, Manuel Vales, un español que residía en la zona oeste de la provincia de Buenos Aires en los inicios del siglo XX, tomó la determinación de abrir las puertas de un almacén y despacho de bebidas que tenía la particularidad de contar con una cancha de bochas, una actividad sumamente popular por la población de la época. Cabe destacar que el local se ubicaba en donde actualmente se establece la esquina de Paso y Saavedra.
Con el paso de los meses, el bar se convirtió en un verdadero furor al interior del partido de Moreno. Muchas personas que trabajaban en los tambos de los alrededores participaban de estos encuentros y le daban vida al lugar. Asimismo, la buena administración del dueño hizo que las cosas fluyan con total normalidad y se extiendan en el tiempo.
En los años 50, el bar cambió de titularidad y pasó a manos de los hermanos Antonio y Domingo Laurenti, quienes tuvieron la capacidad de extender la fama de este comercio por fuera de los límites del partido. No caben dudas de que ésta fue la época más gloriosa del local gastronómico y una de las más recordadas por l@s vecin@s del lugar.
Estas personas intentaron sostener las mismas tradiciones que tenía el bar, aunque con algunas innovaciones: incorporar un billar y un teléfono fijo, uno de los pocos que existía por aquel entonces en Moreno. Fueron cada vez más las personas de diferentes lugares del conurbano bonaerense que se acercaron a este lugar a raíz de los diferentes servicios que se desarrollaron.
El recordado Bar de Laurenti cerró finalmente sus puertas en 1982, a las vísperas de lo que fue la Guerra de Malvinas. Desde aquel momento, nunca más recibió a un cliente, aunque se mantiene en la memoria de miles de personas que tuvieron la posibilidad de atravesar sus pasillos.
No caben dudas de que la zona oeste de la provincia de Buenos Aires cuenta con una enorme cantidad de espacios gastronómicos que han marcado y formado a muchas generaciones. En el partido de Moreno, este bar es un claro ejemplo al respecto y merece que su historia no sea borrada por nada del mundo.
