El colegio María Auxiliadora de Morón cumplió 140 años: la historia de uno de los establecimientos más longevos
Santiago Menu
El pasado 7 de noviembre no fue una fecha más para el Colegio María Auxiliadora de Morón. A 140 años de su fundación, muchas personas recordaron viejas anécdotas que pasaron al interior de esta institución y enviaron sus saludos a los responsables de que aún se mantenga de pie. Este espacio ubicado en 25 de Mayo 472 es un fiel reflejo de cómo fue la vida del municipio de Morón en los últimos años del siglo XIX. En esta fecha tan especial, vale la pena detenerse a narrar algunos detalles sorprendentes de una historia que quedó impregnada para siempre en las paredes de las aulas, en los pupitres y, por sobre todas las cosas, en los corazones de l@s estudiantes.
El colegio María Auxiliadora de Morón entró en funcionamiento un 7 de noviembre de 1882, por lo que se establece como uno de los institutos más longevos que aún reciben alumn@s dentro del municipio. Este establecimiento fue concedido por Monseñor Federico Aneiros, Arzobispo de Buenos Aires y recién en 1887 se concluyó la obra del primer edificio.
Cabe destacar que, en sus inicios, este colegio solamente estaba destinado a la educación primaria, aunque con el paso de los años incorporó otras actividades de culto tales como oratorio y una academia de artes profesionales, que con el tiempo se transformó en el Centro de Formación Profesional. Este dato no resulta menor ya que muchas personas pudieron obtener su primer oficio gracias a estas clases.
A partir de 1932, el colegio María Auxiliadora de Morón tomó un rol crucial en materia de contención social: se creó un pensionado para jóvenes obreras que les permitía no solo vivir en el lugar sino también acceder a los diversos cursos que se dictaban allí. De esta manera, por la mañana se desarrollaban clases de corte y confección, bordados, economía doméstica, piano y violín y por las tardes las jóvenes cumplían sus trabajos respectivos en las fábricas de la zona y retornaban para pasar la noche.
Actualmente, este instituto mantiene las puertas abiertas y recibe de manera constante a jóvenes entre el nivel inicial y el nivel secundario. En el pasado, las escuelas fueron de vital importancia para poder generar un sistema común de valores frente a la ola de inmigraciones que albergó nuestro país. El gran objetivo que tienen las autoridades de esta institución es, sin lugar a dudas, ir por más en el futuro.