El Coliseo de Ituzaingó ya es una realidad y este fin de semana estará abierto al público
Tras cuatro meses de espera, el artista Rubén Díaz inauguró este jueves el Coliseo de Ituzaingó, ubicado en Barcala 450 entre Treinta Tres y Tres Árboles. Además, quienes no hayan podido asistir a la apertura o se hayan quedado con ganas de más, podrán hacerlo este fin de semana.
“Como ya saben soy reiterativo por eso reitero la inauguración”, anunció Rubén este viernes por la tarde a través de su Instagram. Junto a un video del evento de apertura, contó que estará dibujando en vivo e invitó a festejar “nuestro niño interior”.
Tal como prometió, el evento de este jueves contó con pizza y gaseosa para quienes asistieron, así como una degustación de vino. La inauguración estaba programada para las 19 horas, y para ese momento el frente del Coliseo se encontraba plagado de decenas de personas.
Cinco minutos después del horario anunciado, Rubén cruzó Barcala e ingresó a su obra mientras las personas presentes le abrían paso y lo aplaudían. “Esta noche no quiero ser hipócrita, para mí están todos locos. Yo pensé que era el único, pero no”, expresó el “Fantasiólogo” -como se autodefine- desde la escalera de la réplica del edificio romano.
Ante la cantidad de personas que recorrían la nueva atracción de Ituzaingó y hacían fila para sacarse fotos con él, el artista confesó: “No puedo caer en todo esto que estoy viviendo, no entiendo nada”.
Además, Rubén aprovechó, como en cada oportunidad, para dejar un mensaje para la juventud: “Si yo a los 65 años en su momento pude hacer la Torre Eiffel y el Obelisco, la Torre de Pisa, ¿qué no pueden hacer ustedes con toda la vida por delante?”
Acto seguido, el artista comentó a la multitud: “Me dan fuerzas para seguir adelante con proyectos”; y se refirió a su siguiente obra, que está pintada en una de las paredes interiores del Coliseo. Se trata de la Muralla China que, según el Fantasiólogo, es la única que puede superar al edificio inaugurado este jueves.
Un trabajo colectivo
Si bien el ideólogo del Coliseo de Ituzaingó es Rubén Díaz, él no quiso llevarse todo el crédito y comentó: “Atrás de todo esto hay un montón de gente que trabaja”. Tal es así que remarcó la importancia de contar con su presencia en la noche de la inauguración y expresó que “son parte de un trabajo único” que “tuvo una revolución inesperada absolutamente”.
En este sentido, destacó el trabajo de todo un equipo formado por quienes se encargaron de realizar los trabajos de albañilería, herrería y difusión, así como de pintura. Gran parte de esta última estuvo a cargo del artista local Emanuel Castillo, quien recordó a La Ciudad que “esto arrancó más o menos en diciembre después de Navidad”.
“El proyecto comenzó acá atrás, con esta perspectiva”, contó parado delante del primer mural que pintó y que está en el patio trasero del edificio; y explicó que la pintura “coincide con los bancos”. Al respecto, compartió la propuesta que le hizo Rubén: “Me comentó que si me salía esta perspectiva me iba a dar el proyecto completo”.
En este sentido, Emanuel detalló que “al tener un solo pintor y él, se podía trabajar más en equipo y organizar de principio a fin, porque eso es lo complicado, tener una coherencia en la pintura”.
En referencia al mural que le abrió las puertas al proyecto, el joven destacó el desafío de “igualar al frente, que llama mucho la atención, tiene mucha luz, está gastado, está como simulando lo que es antiguo y viejo”. A su vez, confesó: “No sé qué lugar es el preferido mío, pero creo que el frente le ganó a todo. El frente es plenamente hermoso”.
Cabe mencionar que, a la altura de las ansias que crecían entre el público, la inauguración del Coliseo se hizo en tiempo récord. Por este motivo, el equipo de trabajo dio lo mejor de sí para llegar a cumplir las expectativas.
“Las últimas dos semanas veníamos muy atrasados, necesitábamos sí o sí avanzar; entonces me puso a dos albañiles que me ayudaban a pintar, a fondear”, develó. En la misma línea, comentó: “Preparaba color como para tres personas, hasta también para él, porque él también necesitaba pintar. Entonces éramos cuatro, cinco personas pintando todo”.
El despliegue artístico continúa en el Coliseo y en todo Ituzaingó
Si bien la réplica romana ubicada en la calle Barcala ya se inauguró, ambos artistas dejaron en claro que el trabajo continúa. “Una obra de arte nunca se termina de hacer, para llegar a dar un cierre en lo que es la pintura es muy complejo”, explicó Emanuel. En este sentido, sostuvo que queda entre dos y tres semanas de trabajar en detalle, “que es la parte más complicada”.
Respecto a la experiencia de trabajar junto al Fantasiólogo, reconoció: “Hay mucha gente que quiere laburar con Rubén, creo que soy privilegiado por estar al lado de él. La verdad que con el tiempo me di cuenta de que no es joda estar acá, es algo hermoso”.
En este sentido, remarcó que es el primer proyecto que realizan en conjunto y expresó: “Creo que se van a venir más cosas”. A su vez, Rubén no sólo recordó que su próxima obra será la Muralla China, sino que adelantó las siguientes: “La estatua de la libertad del principito y las pirámides de Egipto”.
