Herr Chuc, la historia de la pyme de Hurlingham que elabora chucrut casero
La gastronomía se establece como uno de los grandes dinamizadores de la economía nacional. En prácticamente todos los barrios, se pueden apreciar grandes, medianos y pequeños emprendimientos que producen alimentos de diversas tradiciones apto para toda clase de público. En el municipio de Hurlingham y con el claro objetivo de honrar la memoria de sus antepasados, Inés Andersy prepara con sus propias manos manjares de origen alemán y polaco. Más allá de las complejidades que tiene el impulso de esta clase de actividad, esta mujer junto a su familia no piensa detenerse y deleita los paladares de miles de personas quienes se convirtieron en clientes fijos.
Para contar la historia de esta pyme, es necesario remitirse a la infancia de Inés. Cuando tan solo era una niña, sus padres compraban chucrut y lo guardaban en una barrica de madera. Con el paso del tiempo, las dificultades a la hora de conseguir el alimento se complejizaron, por lo que en pandemia se lanzó a elaborarlo junto a sus hijos y el éxito traspasó por completo las paredes de su hogar.
Por pedido expreso de diferentes personas que probaron esta comida, se animó a lanzar al mercado “Herr Chuc”, que traducido del alemán significa “Señor chucrut”. Con esa pequeña compañía, ofrece también otros tipos de productos típicos de origen alemán tales como pepinos agridulces y salsa relish.
El proceso de elaboración de este comestible no es para nada sencillo: requiere de aproximadamente 15 o 20 días hasta que fermente. Sal marina, vinagre y algunos otros condimentos secretos son los que utiliza día a día Inés en su pequeña cocina casera.
Además de estos productos, una de las grandes especialidades en el menú de esta vecina de Hurlingham es, sin lugar a dudas, las salchichas alemanas. De acuerdo a su opinión, el chucrut puede ser un acompañante ideal para esta clase de comidas y es por eso que es uno de los productos más vendidos de todos los que ofrece.
Desde el municipio de Hurlingham y pese a las complejidades que presenta la economía actual, Inés Andersy junto a su familia intenta proteger buena parte del recuerdo que tiene de sus antepasados. Cada vez más personas apuestan por las diferentes comidas que ofrece a la venta y se sorprenden no solamente por la calidad de los mismos, sino también por el amor y la pasión que llevan consigo.
