Un nuevo allanamiento en la causa de "Nahuelito" Paiva y datos que permiten suponer que pasó
Se negó a declara el imputado Nahuel “Nahuelito” Paiva, acusado del homicidio de Fernando Nazareno Vernaz, quien fue encontrado sin vida el sábado a la madrugada tirado al costado de su camioneta Ford Ecosport en la localidad de William Morris.
La declaración indagatoria la dispusieron los fiscales de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 de Morón, Adriana Suárez Corripio y Fernando Siquier Rodríguez, quienes esperan los resultados preliminares de la autopsia de Vernaz (28). En la misma resolución, se ordenó que el detenido sea enviado a una sede policial hasta tanto se dicte la prisión preventiva, contaron hoy a Diario La Ciudad las fuentes judiciales.
Un nuevo allanamiento
Anoche se realizó un nuevo allanamiento en la casa del fallecido Vernaz en busca de nuevo elementos para la causa. En el lugar se secuestró una escopeta recortada y ropa de interés para a causa. Se levantaron muchas muestras de presunto tejido hemático -mancha de sangre- en varios sectores de la casa de la víctima. Todo lo nuevo se ha incorporando en la causa como elemento de prueba.
“Trabajó muy bien la policía científica con luces forenses. Todo se pudo dar rápido para que la causa avance”, dijo a La Ciudad al ser consultada la fiscal Corripio.
Son tres hipótesis que analizan los informantes: una de ella es que lo mataron en la casa, lo fueron a descarar y chocaron el auto para simular un accidente. Otra que lo mataron en el camino y la última que fue asesinado en la escena de hallazgo. Los investigadores aun siguen a la espera para saber donde está el arma del crimen.
Resultado de autopsia:
El resultado preliminar de autopsia en el cuerpo de Fernando Nazareno Vernaz indica que recibió “dos heridas de arma de fuego una en hemitórax y otro en la pierna derecha con arma de fuego de calibre grande” esa fue la causa de su muerte que se dio de manera inmediata.
Mientras tanto, la adolescente de 15 años, quedó a disposición del fiscal Pablo Cabrejas, del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil 2 de Morón.
Una historia de amistad y venta de drogas.
Una historia de conflicto entre narcos por el poder de la zona y una casa en cuestión para transformarla en un búnker, fue la causa de un nuevo homicidio que sacudió los vecinos de Villa Udaondo.
La nueva víctima de un crimen con vinculación narco fue Fernando Nazareno Vernaz, quien fue hallado asesinado a la vera de la calle De La Tradición, enfrente del INTA, donde en un primero momento se creía que había sido una muerte por accidente de transito, pero luego se deslumbró que se trató de homicidio.
Según los peritos, Fernando tenía orificios de balas con ingreso y salida de derecha a izquierda de arriba hacía abajo y de adelante hacía atrás, heridas que le causó la muerte en el acto”. Los proyectiles fueron halladas a lado del cuerpo.
Luego la historia fue tomando el color de un claro ajuste de cuentas por “deuda de drogas y dinero” entre la víctima y el homicida Nahuel Paiva (33), según indicaron las fuentes judiciales consultado por Diario La Ciudad.
También se supo de la investigación, que Paiva venía siendo investigado por Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (UFESE) a cargo de Santiago Marquevich, por una vinculación con una causa de drogas y que tenía sus operaciones en la zona de Villa Udaondo y Las Cabañas, pero que aun faltaban elementos para llegar a su arresto.
La denuncia que llevó a la detención de Paiva
Tras el crimen de Vernaz, su asesino se ocultó en la casa de unos familiares, pero luego fue delatado cuando una menor de 15 años que estaba al momento del asesinato, contó a los presentes a viva voz “matamos a Fernando” y fue ahí que ambos se escaparon del lugar al ser denunciado a la policía.
La policía de Las Cabañas, el Comando de Patrullas de Ituzaingó y de Hurlingham ante la denuncia y la orden de allanamiento dado por la fiscalía llegaron al hotel de alojamiento Los Álamos de Villa Udaondo, ubicada sobre Nicolás Repetto entre Santos Vega y el Gato, y en una de las habitaciones encontraron a Paiva con la menor. En el lugar se secuestró un arma calibre 9 milímetro y un teléfono celular.
