Ituzaingó: denunció a su mejor amigo por abusar de su cuñada mientras dormía y quedó grabado
Diario La Ciudad
El hecho ocurrió la madrugada del 13 de diciembre tras una salida nocturna. Una cámara de seguridad registró el ataque y el acusado reconoció la situación alegando estar alcoholizado.
Una relación de amistad de más de diez años culminó en una denuncia penal, luego de que un joven acusara a quien consideraba su mejor amigo de haber abusado sexualmente de su cuñada. El incidente tuvo lugar dentro del domicilio del denunciante, donde la víctima se encontraba pernoctando.
El episodio se registró en la madrugada del pasado 13 de diciembre. Según consta en la denuncia, el grupo regresó a la vivienda tras haber asistido a un boliche. El propietario de la casa permitió que el acusado, un joven de 24 años, se quedara a dormir para solicitar un transporte al amanecer. En el mismo ambiente, específicamente en un colchón ubicado en el comedor, descansaban el hermano del dueño de casa y su pareja.
De acuerdo con la reconstrucción de los hechos basada en el testimonio del denunciante, la agresión se produjo en el momento en que él se dirigió a ducharse, dejando al acusado solo en el comedor. El implicado habría aprovechado la indefensión de la joven, que se encontraba dormida, para realizar tocamientos y actos sexuales sin su consentimiento.

La evidencia fílmica
El ataque quedó registrado por una cámara de seguridad instalada en el interior de la vivienda. Las imágenes, que fueron preservadas como material probatorio, muestran la secuencia delictiva. Además del abuso, las grabaciones revelan que el acusado tomó fotografías de la víctima sin autorización.
El registro visual también expone la premeditación y el estado de alerta del sujeto: se observa cómo se acercó reiteradamente a la puerta del baño para verificar que el dueño de casa continuara allí y sus intentos por interferir con el sistema de filmación, maniobra que no logró concretar.
La confrontación y la situación judicial
Tras descubrir lo sucedido, la familia confrontó al joven de 24 años. El acusado reconoció los hechos, atribuyendo su conducta al consumo de alcohol. Posteriormente, envió mensajes de texto pidiendo disculpas y manifestando vergüenza, antes de cerrar sus perfiles en redes sociales ante la escalada del conflicto.
La causa ha sido radicada en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°1 de Ituzaingó, bajo la dirección del fiscal Marcelo Tavolaro.
Desde el Ministerio Público Fiscal aclararon la situación procesal: al tratarse de un delito de instancia privada y siendo la víctima mayor de edad, el avance de la causa depende exclusivamente de que ella impulse la acción penal. De no formalizarse esta instancia por parte de la damnificada, el expediente podría ser archivado, permitiendo que el acusado permanezca en libertad.
El denunciante decidió hacer público el caso con el fin de alertar a la comunidad. "No fue un malentendido ni un error: fue un abuso dentro de un contexto de confianza", declaró, instando a otras posibles víctimas a denunciar hechos similares.

