José Antonio Buján, la historia del primer médico de Paso del Rey
El acceso a la salud es una necesidad que debe ser garantizada por el Estado Nacional. Para ello, además de contar con una infraestructura adecuada e insumos de calidad, es de vital importancia formar a medic@s que se ocupen de las necesidades de la población. En un contexto en el cual lo público es puesto en cuestionamiento y desfinanciado en favor de las necesidades de las grandes corporaciones, es necesario remontarnos al pasado para contar las historias de los primeros hombres y mujeres que oficiaron de doctores y sirvieron a su lugar de orígen. En el municipio de Moreno, más precisamente en la localidad de Paso del Rey, este reconocimiento tiene nombre y apellido: José Antonio Buján. Desde Diario La Ciudad relataremos algunos detalles que marcan a la perfección la vida y obra de un ciudadano que permanecerá en la memoria colectiva del pueblo por siempre.
Este profesional nació en la ciudad de Galicia, España, aunque cuando tan solo era un niño arribó a Buenos Aires en compañía de sus seres más cercanos. Sus estudios universitarios en medicina se dieron en la prestigiosa Universidad de Buenos Aires y finalizaron en 1948. Sin embargo, su punto de conexión con esta profesión se profundizó al arribar de lleno al partido de Moreno.
Su padre poseía una quinta de suma relevancia en la localidad de Paso del Rey que utilizaba para descansar los fines de semana en compañía de su familia y es por esta razón que conocía a la perfección la zona. Hasta ese momento, no existía un profesional de la salud que residiera en el lugar, por lo que rápidamente se ganó el cariño de l@s vecin@s.
De acuerdo a algunos relatos de la época, Buján se vio en la necesidad de convertirse en un médico rural, debido a la gran extensión de campos que había por aquel entonces en el conurbano bonaerense. Sus trabajos iban desde partos hasta asistencias a traumatismos. Es por esta razón que se lo consideraba como un verdadero médico integral, debido a la enorme cantidad de especializaciones que tenía.
Más allá que por lo general utilizaba un automóvil que le prestaba su padre, en las épocas de lluvia debía recurrir a los servicios de un caballo para cruzar los ríos que crecían. Es por esta razón que las personas del lugar lo respetaban y lo consideraban como un hombre sustancial en el barrio.
Luego de haber servido durante años a la comunidad de Paso del Rey, José Antonio Buján falleció el 17 de agosto de 1998. En la actualidad la plaza ubicada en la Ruta Provincial 7, una de las más concurridas al interior del partido de Moreno, lleva su nombre en homenaje al primer médico en instalarse en la localidad. No caben dudas de que toda su obra fue de vital importancia para que la zona oeste de la provincia de Buenos Aires pueda desarrollarse y se avancen en sistemas de salud público que atiendan a cada una de las personas que así lo requieran.
